Pérdida de apetito en adultos mayores: una señal que no debe ignorarse

No comer bien no es parte natural del envejecimiento. La Dra. Vanessa Pedraza, invitada en Dr. TB, detalla los factores detrás de la falta de apetito en adultos mayores. Foto: captura.
La falta de apetito en los adultos mayores es una preocupación frecuente entre sus familiares, pues muchas veces se asocia con un deterioro en la salud general. En el programa Dr. TB, conducido por el Dr. Tomás Borda, la Dra. Vanessa Pedraza Valenzuela, geriatra del Hospital Nacional Guillermo Almenara Irigoyen, abordó este tema y explicó las posibles causas, consecuencias y estrategias para enfrentar esta situación.
CAUSAS VARIADAS Y SU IMPACTO EN LA SALUD
La especialista señaló que "la pérdida de apetito es otra de las frecuentes preguntas y preocupaciones del familiar (del adulto mayor)". Sin embargo, es importante diferenciar si el paciente ha dejado de comer recientemente o si ha disminuido progresivamente su ingesta a lo largo de semanas o meses.
Existen diversas razones que pueden explicar esta situación, desde condiciones metabólicas, infecciosas y crónicas, hasta factores emocionales o incluso culturales.
Uno de los conceptos fundamentales en este contexto es la sarcopenia, que consiste en la pérdida progresiva de masa muscular y puede convertirse en un predictor de mortalidad. "Es acumulativa, se acentúa más en los adultos mayores y es severa", enfatizó la doctora Pedraza.
La sarcopenia también influye en la recuperación del paciente cuando es hospitalizado, pues si ingresa con una masa muscular muy reducida, su evolución puede verse comprometida.
RIESGOS ASOCIADOS A LA DESNUTRICIÓN
El Dr. Borda resaltó que "ha perdido el 60 % de su masa muscular, es un factor predictivo de muerte y de riesgo intrahospitalario". Esta situación también puede derivar en complicaciones como las escaras, lesiones en la piel que aparecen cuando el paciente permanece postrado por falta de energía y protección muscular. Además de ser dolorosas y de alto riesgo de infección, afectan la calidad de vida del paciente y su entorno.
SOLUCIONES Y RECOMENDACIONES
Si bien no existe un alimento mágico para revertir la desnutrición, actualmente hay suplementos hiperproteicos que pueden ayudar. No obstante, la Dra. Pedraza recalcó que "las vitaminas no dejan de ser drogas, los suplementos no reemplazan el alimento".
En ese sentido, enfatizó la importancia de la salud bucal en la alimentación de los adultos mayores, pues "la digestión empieza por los dientes". Mantener una buena higiene y revisión odontológica periódica favorece una mejor ingesta y absorción de nutrientes.
Asimismo, el estado emocional juega un rol fundamental. En algunos casos, la falta de apetito responde a una depresión o a enfermedades degenerativas como la demencia, en la que los pacientes incluso pueden olvidar cómo masticar.
"Cuando uno en casa tiene un paciente con una enfermedad crónica terminal, ya no se trata de lo que el familiar quiere, se trata de las necesidades que el paciente requiere", explicó la especialista. Por ello, es esencial adaptar la alimentación a las circunstancias del paciente y brindarle un acompañamiento integral.
NUTRICIÓN Y CUIDADO ESPECIALIZADO
El Dr. Borda mencionó la importancia de evaluar la necesidad de nutrición enteral o parenteral en algunos casos, mediante sondas de alimentación. Además, invitó a la Dra. Pedraza a un próximo programa para tratar el tema de los cuidados paliativos en adultos mayores.
Para conocer más detalles sobre este importante tema, se puede ver la entrevista completa en el programa Dr. TB, conducido por el Dr. Tomás Borda, de lunes a viernes a las 2 p. m. También, puedes verlo en nuestro canal de YouTube.