El exviceministro de Energía y Minas, Pedro Gamio, se mostró a favor de una renegociación del gas de Camisea, pero sin patear el tablero, porque eso significa no saber negociar.

Hay que llamar a la serenidad y encausar una tarea pendiente, indicó en diálogo con TVPerú. Necesitamos avanzar en defender la economía de los peruanos, fundamentalmnte de los más necesitados, añadió.

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"Hay que tener mucho cuidado de las formas", señaló Gamio, "más aún si uno ostenta un cargo de gran responsabilidad, porque eso genera una imagen que no es la mejor para el país", aseveró.

China y Vietnam siendo países comunistas negocian de una manera sorprendente, dando seguridad juridica a los inversionistas, manifestó el exviceministro.

En el caso peruano, Gamio precisó que amerita renegociar, sabiendo qué renegociar, porque el problema no son las utilidades. Solo en regalías el Estado peruano recibe 37.5% más el impuesto a la renta que es mitad mitad, agregó.

"Lo que falta es masificar el gas metano en el país, que además cuesta la mitad del baloncito de gas propano butano por el que hemos llegado a pagar 70 soles, cuando el precio del petroleo se disparó", acotó.

Hace 17 años que llegó el gas a Lima y solo 5 millones de personas se benefician con el producto natural, lo que hay que hacer ahora el lograr tener 200 mil conexiones por año, para que se beneficien un millón de personas más, pero en 5 años tendríamos un total de 10 millones de personas beneficiadas, remarcó.

Gamio puntualizó que la renegociación legalmente lo realiza un equipo técnico de Perú Petro. La PCM le da las instrucciones pertinentes al ministro del sector Energía y Minas que delega las negociaciones en el equipo técnico, añadió. 

Consultado en torno a los modelos exitosos que existen de explotación y masificación del gas natural, el exviceministro mostró su preferencia por el modelo colombiano, que logró más teniendo menos gas, sin castigar la inversión privada. Bolivia bajó la busqueda de más gas y tiene un futuro incierto en el nivel de sus reservas, concluyó.