“La orden de detención preliminar contra Pedro Pablo Kuczynski me genera malestar, pero también debo decir que me genera ilusión porque estamos superando el trauma de la impunidad en el país”, señaló el exministro de Justicia, Gustavo Adrianzén.

“En la medida que demostremos que las autoridades judiciales van adelante cuidando los debidos procesos, creo que nos vamos curando del mal que hemos sufrido con la corrupción”, indicó.

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“Esa percepción de que él que tiene padrino en el Poder Judicial la libra y él que no va a la cárcel, debe de olvidarse”, puntualizó Adrianzén, quien confió que la orden lo sorprendió teniendo en cuenta que no se tenía mucha información sobre las investigaciones.

Pienso que la detención del exmandatario, que no está siendo investigado por actos que tienen que ver con la campaña presidencial, sino por actos ocurridos en el 2006, cuando era ministro, se fundamenta en la necesidad de recabar la última prueba que permitirá al fiscal José Domingo Pérez anunciar el paso de una investigación preliminar a una preparatoria, aseveró.

“Todo hombre tiene como derecho a la libertad y cuando se dicta una orden de una prisión es el extremo”, expresó. “Por eso tratándose de un exjefe de Estado, la decisión fiscal debe haber sido plenamente razonada y justificada, primero porque se trata de la libertad de una persona y segundo por la envestidura de un expresidente”, acotó.