El ministro de Economía y Finanzas, Waldo Mendoza, señaló  que la ley del agro recientemente aprobada por el Congreso no ha dejado satisfecho ni a trabajadores ni a empresarios, pero puede ser el primer paso para una solución más comprensiva en el futuro.

La ley es imperfecta, reconoció Mendoza. Sin embargo, “creo que el trabajo que tuvo el Congreso en coordinacion en parte con el Ejecutivo permitió dar la ley que responde a algunos problemas de corto plazo que deberán ser solucionados a largo plazo”, acotó.

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“Los trabajadores del sector agrario han conseguido elevar sus salarios, quizá no en lo que esperaban, pero este puede ser el primer paso para un enfrentamiento más frontal y comprensivo del tema agrario que deberá resolver este gobierno y los que vienen”, indicó.

“Los trabajadores han conseguido un aumento de 30%, es decir, 279 soles por mes, que parece poco significativo, pero una elevación de 10%, 15% o 20% en los salarios, se consigue en diez a 15 años, por lo cual una mejora súbita de esta magnitud es importante”, subrayó. 

En conferencia de prensa, luego de la reunión del Consejo de Ministros, Mendoza refirió que si se hubiera efectuado un aumento de la remuneración de 50%, como se proponía, los trabajadores hubieran festejado por muy poco tiempo y a la larga las empresas no hubieran sido sostenibles y los trabajadores no hubiesen encontrado los trabajos que esperaban. 

El ministro resaltó que la ley considera también incorporar una propuesta sostenida por el MEF en el sentido que las exoneraciones y no permanentes deben ser transitorias y permite una gradualidad.

El Gobierno entiende lo difícil que es este año y el 2021, por eso la disminución de los beneficios tributarios empezará en el 2022 y en el 2028 las empresas del sector agroexportador pagarán lo mismo que el resto de las empresas, es decir, (un impuesto a la renta de) 29.5%.

En ese sentido, refirió que el Ejecutivo ha apoyado la propuesta de que los beneficios tributarios para las empresas más pequeñas se mantengan por más tiempo, de tal manera que paguen un impuesto a la renta de 15% por cinco años y después se elevará gradualmente.