El mayor legado de un Gobierno será mejorar las condiciones de vida de las personas, especialmente de los más débiles, aseguró hoy el presidente de la república, Pedro Castillo, al remarcar que en ese esfuerzo está empeñada su gestión.

El mandatario inauguró esta mañana las nuevas instalaciones de la institución educativa Prite Canto Grande, en el distrito de San Juan de Lurigancho, que forma parte del Programa de Intervención Temprana, el cual está destinado a la Educación Básica Especial.

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Precisó que en estos niños debe estar centrada toda la atención del Estado, para garantizar su derecho a la educación, a la salud y al desarrollo integral, dado que son personas doblemente vulnerables.

“En muchos hogares hay niños con discapacidad por síndrome de Down, microcefalia, parálisis cerebral, así como niños en riesgo de discapacidad por asfixia, parto múltiple y otras causas, que requieren de una atención especializada para estimular sus capacidades lo más que se pueda y evitar rezagos en su vida futura”, apuntó.

El Gobierno, aseguró el jefe de Estado, hará todo el esfuerzo para que este quinquenio sea el de la Educación y de la verdadera descentralización, garantizando la infraestructura y la alimentación de los niños, de modo que puedan alcanzar todo su potencial y talento para contribuir a un Perú con oportunidades, crecimiento y desarrollo.

“Qué bien la experiencia de la madre cuyo niño ha mejorado, ese es el trabajo que debemos hacer. Así queremos ver al Perú, caminando firme, sin ningún tropiezo, con confianza. Por muchos años el país ha sido conducido por expertos políticos, grandes autoridades; pido a los peruanos que le den la oportunidad a un maestro por cinco años para dar seguridad a las familias”, manifestó.

Asimismo, destacó que las nuevas instalaciones de la institución educativa Prite Canto Grande son un paso fundamental para el desarrollo de los niños menores de tres años de edad con discapacidad o con riesgo de adquirirla.

Subrayó que el país cuenta con 119 sedes del Prite en las 25 regiones, que atendieron a 4063 niñas y niños el año pasado, y que el compromiso de su gobierno es ampliar la cobertura para llegar a los menores que viven en hogares en situación de pobreza y pobreza extrema.

De igual modo, el presidente Castillo sostuvo que el rol de la comunidad, compartido con el Estado, es fundamental para salvaguardar la integridad física y mental de estos niños y sus familias, ya que todavía se enfrentan a los prejuicios, a la discriminación y son más vulnerables a ser víctimas de acoso escolar.

“Quiero convocar a los peruanos, a los poderes del Estado y a las organizaciones para que, desde el rol que les corresponde, contribuyan a tener un país más inclusivo, que respete los derechos de todos y, especialmente, que cuide siempre a nuestras niñas y niños”, concluyó.

El jefe de Estado estuvo acompañado por el presidente del Consejo de Ministros, Aníbal Torres; y el titular de Educación, Rosendo Serna.