El episodio inicia con la historia de María Parado de Bellido que aparece en una semblanza hecha por Antonia.

José Faustino Sánchez Carrión invita a Paco a participar de un nuevo proyecto periodístico, pero le pide que Antonio, quien en verdad es Antonia, se una a ellos. Sin embargo, ella rechaza la oferta porque teme que la juzguen por ser mulata y mujer.

Por otro lado, Paco muestra sus celos hacia Valentín, el nuevo asistente de Catalina. El dilema se vuelve más grave cuando el joven Robles le responde mal al titiritero.

Rosa María y Miguel se encuentran y ella le dice que tendrá su bebé a escondidas con su madre y que, de ser hijo de ambos, le pedirá el divorcio a su esposo. Al mismo tiempo, Constanza y don Adolfo inician una relación en secreto.

A pocos días de dar a luz, Adolfo ordena que Rosa María sea encerrada en su habitación para que el bebé no corra peligro. Doña Constanza se encarga de vigilarla, pero ante una distracción, la menor de los Robles logra escapar e ir a casa de sus padres.

Sin embargo, en el camino, Paula la encuentra y la ayuda a llegar, pues el dolor no la dejaba caminar. Miguel se entera por su hermana que Rosa María está a punto de dar a luz y está ansioso por saber si es su hijo o no.

Tras un doloroso parto, Rosa María da a luz a un varón que, tal y como ella lo sentía, es hijo de Miguel, quien se hace cargo del bebé. Ante esto, Paco se entera de la infidelidad de su hermana y le dice que siempre la apoyará.

Pero los problemas recién empezarán cuando Adolfo pregunta por su hijo. Para salvar la vida del niño y Rosa María, Josefa le miente y dice que nació deforme y muerto y tuvieron que enterrarlo de inmediato. Adolfo no se conformará con lo sucedido y aún así, no se separará de Rosa María.

Finalmente, tras la salida definitiva de San Martín, los Realistas siguen avanzando y ganando las batallas. Esta noticia llega a oídos de Manuela Sáenz que le pide a Bolívar hacer algo al respecto.

No te pierdas mañana otro episodio de la serie a las 2 p.m. por TVPerú.