El Santuario Histórico de Machupicchu ha marcado un hito en la conservación e investigación del oso de anteojos (Tremactos ornatus) al convertirse en la primera área natural protegida en Perú en implementar un sistema de monitoreo satelital para esta especie emblemática. Este avance se destaca como un esfuerzo crucial para la preservación de la biodiversidad en el país.

El 15 y 17 de mayo se colocaron los primeros collares satelitales en dos osas de anteojos en la zona de Wiñayhuayna dentro del Santuario Histórico de Machupicchu. Esta acción es parte de una nueva etapa en el proyecto de investigación y conservación de esta especie y su hábitat, liderada por la organización Conservación del Oso de Anteojos (SBC) en colaboración con el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), entidad adscrita al Ministerio del Ambiente.

La colocación de los collares satelitales fue llevada a cabo por un equipo liderado por la investigadora canadiense Robyn Appleton, junto a investigadores de SBC y el personal guardaparque del Santuario. Este método de monitoreo, ampliamente utilizado en otros grandes mamíferos a nivel mundial, proporcionará información valiosa sobre los movimientos y el uso del hábitat de los osos de anteojos dentro y alrededor del área protegida.

Esta fase del proyecto incluye la instalación de 10 collares satelitales en igual número de osos de anteojos en el Santuario Histórico de Machupicchu. La implementación de estos dispositivos permitirá desarrollar una estrategia innovadora de monitoreo, gestión y conservación de la biodiversidad en Perú. El proyecto cuenta con el apoyo de instituciones como el Zoológico de San Diego, Inkaterra y la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco.

Este esfuerzo colaborativo no solo potencia la conservación de los osos de anteojos, sino que también posiciona al Santuario Histórico de Machupicchu como un líder en la implementación de tecnologías avanzadas para la gestión de áreas naturales protegidas en el país.

Foto: Sernanp