La exposición “Koshi Kené, el poder del Kené” nos traslada hasta la sabiduría de la Amazonía del Perú. Arte y naturaleza se unen en esta muestra de Olinda Silvano, curada por Alfredo Villar, ganadora del segundo lugar en la Bienal de Venecia.

En Presencia Cultural conversamos con la artista y el curador para profundizar en el significado de la muestra que se realiza en el ICPNA del Centro de Lima.

Naturaleza y arte en armonía

Según Olinda Silvano, este trabajo fue realizado con mujeres muralistas Soi Noma, quienes entregaron mucho amor, paciencia y armonía en este trabajo.

“Fue divertido gozar el arte kené, pintar en la pared el diseño de la anaconda que abre el camino porque es madre de la tierra, del agua y de la naturaleza”, explica la artista shipibo-konibo

Arte kené inmortal

El kene es el diseño que hacen las mujeres shipibo-konibo desde tiempos inmemoriables. Es un diseño que imita a los de la naturaleza que las mujeres hacen aflorar para sus vestidos, bordados, etc. Es un diseño que inunda el mundo para embellecerlo.

Por otro lado, el koshi es el poder del kené, con el que se alude a la energía de las plantas medicinales que entregan a estas mujeres las visiones, a partir de las cuales hacen sus diseños.

“Al migrar de la comunidad a la ciudad, no hemos olvidado nuestra identidad. Más bien, hemos visibilizado y damos a conocer a nivel mundial nuestro diseño kené”, dijo Olinda.

Anaconda: El centro de la muestra

La pieza central de la exposición es un Ronin o anaconda, que para los shipibo-konibo es el diseño madre de todos. A partir de este se generan los demás.

“Si se adentran al ronin verán 30 diseños distintos. No parecen varios porque han fluido como uno solo”, dijo la artista.

La muestra tiene colores inspirados en los animales, plantas silvestres del río Ucayali y la alegría de la Amazonía del Perú que mantienen un equilibrio porque el kené es poder, sanación, terapia y curación.