Es una buena medida que los niños salgan a pasear fuera de sus casas desde este lunes 18 de mayo porque este confinamiento les está pasando factura, señaló el director de Salud Mental, del Ministerio de Salud (Minsa), Carlos Browley.

El médico psiquiatra indicó que los problemas que se han presentado en los menores de edad tienen que ver con los comportamientos de miedo e inseguridad, ansiedad y depresión, y algunos que ya comenzaban a controlar sus esfínteres, han vuelto al uso de los pañales.

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Sin embargo, precisó que la salida de los niños con un adulto es potestativo de los padres. No es obligatorio es la voluntad de cada uno de ellos de decidir sacar a sus hijos bajo su responsabilidad, porque hay que cuidarlos, agregó.

No hay que exagerar, no es que la oportunidad que se presenta a partir del lunes signifique que toda la familia tenga que dejar la casa, expresó. Este es un primer paso para aliviar a los niños del tedio del confinamiento, que ha creado dos problemas, la misofobia, que es el miedo a contaminarse y el síndrome de la cabaña que es el temor a salir, aseveró.

Los niños han perdido mucho en estos dos meses, ya no tienen las amistades que comenzaron a hacer en el colegio, no ven a sus profesores  y algunas veces ven el comportamiento exagerado de sus padres, añaqdió.

Los niños aprenden viendo a los mayores porque el aprendizaje es una conducta social aprendida, por lo tanto hay que ser modelo para los hijos, acotó.

La medida es correcta y hay que aprovecharla de una manera responsable, manifestó, Cuando salgamos a la calle este lunes, practiquemos con los niños antes de salir, recomendando todo aquello que hay que hacer y lo que no hay que hacer. Este es un primer paso de aquello que deberá ser paulatino, concluyó.