Luego de años de largos procesos judiciales, el expresidente Alejandro Toledo finalmente ha sido extraditado a Perú para responder ante la justicia por los cargos imputados en su contra por el caso Interoceánica.

Retrocediendo en el tiempo, llegamos al inicio de este particular caso que también involucra a decenas de actores, la constructora Odebrecht entre ellos.

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Era el año 2005 cuando se estableció la contratación de la empresa brasilera para la construcción de la carretera Interoceánica, la cual uniría Perú con Brasil. Se trataba de un megaproyecto impulsado dentro de la gestión de Alejandro Toledo Manrique, quien se encontraba asumiendo la Presidencia de la República en ese entonces.

Pese a las observaciones presentadas por la Contraloría General de la República en relación al impacto ambiental del proyecto y la falta de certificación por parte del Sistema Nacional de Inversión Pública (SNIP), el contrato fue firmado y se dio inicio a la construcción de la carretera.

El consorcio Conirsa, conformado por las empresas Norberto Odebrecht, Graña y Montero y JJ Camet e Ingenieros Civiles y Contratistas, fue el encargado de los tramos 2 y 3 del megaproyecto, mientras que la construcción del tramo 4 cayó bajo responsabilidad de Intersur Concesiones, integrada por las empresas Andrade Gutiérrez, Camargo Correa, Queiroz Galvão.

El proyecto fue culminado el año 2010, durante la segunda gestión de Alan García Pérez. Sin embargo, no fue sino hasta el 2017, tras las declaraciones de Jorge Barata ante la justicia, que iniciaron las investigaciones contra el exmandatario. El empresario brasilero, quien se encontraba en calidad de colaborador eficaz por el caso Odebretch, confesó que Toledo había recibido más de 31 millones de dólares por parte de la constructora para conseguir la licitación del proyecto de la carretera Interoceánica.

Posteriores investigaciones de la Fiscalía apuntaron a que también se habrían entregado otros 6 millones de dólares al ex jefe de Estado para que la licitación del tramo 4 se dé a favor de Intersur Concesiones. Los depósitos se habrían dado a través de cuentas bancarias del empresario Josef Maiman, quien era amigo cercano del expresidente. 

Es por este caso que el Ministerio Público solicita 35 años de prisión efectiva para el fundador del partido Perú Posible por las irregularidades respecto a la construcción del tramo 4, 20 años por el tramo 2 y 16 años por el tramo 3. A Toledo Manrique se le acusa de la presunta comisión de los delitos de tráfico de influencias, lavado de activos y colusión. Además de este proceso, el exmandatario también está siendo investigado por el caso Ecoteva, que lo involucra en la adquisición de inmuebles a nombre de su suegra con dinero recibido por parte de Odebrecht, según la hipótesis fiscal.