Unicef identificó normas sociales relacionadas con la violencia y el embarazo adolescente
Foto: Unicef.
Un total de 1,824 adolescentes de Loreto, Ucayali, Huancavelica y Lima Norte, en Lima Metropolitana participaron de la elaboración de un estudio del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia – Unicef que identificó normas sociales que contribuyen a generar las condiciones para evitar casos de embarazo adolescente y de violencia física, psicológica y sexual contra adolescentes.
El denominado “Estudio de normas sociales sobre la violencia y el embarazo adolescente”, que incluyó la realización de una encuesta y jornadas de reflexión, es pionero en el país.
Este determinó que, en cuanto a educación sexual, en los distritos de Callería y Masisea, en la región Ucayali, el 32% y 51% de adolescentes, respectivamente, dijo haber comenzado a tener relaciones entre los 14 y 17 años. El promedio del inicio de la vida sexual es 14.2 años en Callería y 13.9 años en Masisea.
Asimismo, más del 70% cree que en el colegio es fácil o muy fácil hablar de sexualidad con niños, niñas y adolescentes. Sin embargo, la vergüenza es una barrera para conseguir y usar preservativos.
En cuanto a violencia, el 38% de los adolescentes y adultos encuestados la acepta en Callería y el 48% en Masisea. En las escuelas de Masisea, el 31% de los encuestados consideró que se emplean regaños y gritos y el 28% que se usan palmadas para corregir.
VIDA SEXUAL TEMPRANA
Loreto vive una situación similar. En esta región, se realizó el estudio en los distritos de Nauta, Mazán y San Juan Bautista. En este último el 27% de adolescentes afirmó haber tenido relaciones sexuales con más de tres personas en los últimos seis meses, mientras que en Mazán el 46% de chicos dijo ya haber iniciado su vida sexual, frente a un 20% de chicas.
Lamentablemente, la mitad de los adolescentes y adultos encuestados en los tres distritos de Loreto aprueba la violencia contra las hijas e hijos. En Mazán, 5 de cada 10 personas piensan que “a los hijos varones hay que tratarlos duro para que aprendan a ser verdaderos hombres”.
VERGÜENZA DE ADQUIRIR MÉTODOS ANTICONCEPTIVOS
Por otro lado, en los distritos de Huancavelica y Acoria, en la región Huancavelica, más del 60% de adolescentes usó un método anticonceptivo en su última relación sexual. Sin embargo, muchos de ellos y ellas indican que no los usan porque “a su pareja no les gusta” o “le dio vergüenza adquirirlos”.
Un dato alentador es que más del 75% de adolescentes de los distritos mencionados considera que en el colegio pueden hablar con más facilidad sobre sexualidad, y que es el profesor quien les da mayor información sobre estos temas.
En Huancavelica y Acoria se manifiestan con más frecuencia el uso de castigos psicológicos en comparación a los otros distritos de las regiones contempladas en el estudio. En Acoria, los padres usan más el castigo físico y los gritos para corregir en comparación con las demás zonas del estudio.
RECHAZO AL CASTIGO FÍSICO
Finalmente, en Carabayllo hay avances en tema de educación sexual y en el rechazo a la violencia como forma de crianza. Por ejemplo, el 68% de adolescentes considera que en el colegio pueden hablar con más facilidad sobre sexualidad, y se evidencia un mayor rechazo al castigo físico como método de corrección en la infancia.
Unicef considera fundamental estudiar las normas sociales relacionadas con el embarazo adolescente y las violencias que afectan a la población adolescente para identificar y comprender las percepciones, creencias y comportamientos que limitan el ejercicio pleno de sus derechos dentro de su familia y comunidad. A partir de allí, pretende contribuir a diseñar políticas públicas integrales y estrategias que promuevan los cambios de comportamientos para revertir el impacto negativo de estas normas sociales en el desarrollo integral de las y los adolescentes del país.
Con información de Unicef.