En Trujillo, una bebé de apenas 10 meses de vida salvó de morir gracias a la exitosa intervención de los médicos del Hospital Víctor Lazarte, de Essalud.

Ella fue llevada al servicio de Emergencia Pediátrica por su madre, quien observó molestias en su hija.

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Al ser sometida a una radiografía, los médicos especialistas se sorprendieron al observar las placas. La bebé tenía un crucifijo alojado en el esófago.

Luis Esteves, gastroenterólogo, explicó que tuvieron que realizarse una endoscopía terapéutica para retirar el cuerpo extraño.

“Este procedimiento consiste en ingresar con el endoscopio y, mediante una pinza, extraemos el cuerpo extraño”, indicó.

El médico explicó que en un inicio no se podía extraer porque estaba incrustrado.

“La verdad, hemos tratado en múltiples ocasiones hasta que en una de esas se logró movilizar el cuerpo extraño”, narró.

La intervención quirúrgica duró entre 20 a 25 minutos, aproximadamente, porque el procedimiento estuvo complicado.

Cumplido el objetivo, la bebé fue puesta en observación por varias horas para seguir su reacción.

En este proceso, la menor tuvo que ser entubada para lograr su recuperación. El médico remarcó que no fue fácil, pero tampoco imposible.

Por su parte, Mari Carmen Sejami, madre de la bebé, agradeció a los médicos que atendieron a su hija y salvarle la vida.

“Agradezco a los médicos que milagrosamente salvaron a mi hija. No sabíamos qué hacer en ese momento”, afirmó.

La bebé de 10 meses se recupera muy bien para el alivio de sus padres y profesionales del hospital de Trujillo, que el fin de semana estuvo muy tenso.