Oleaje anómalo en Piura: turismo y pesca son los sectores más afectados
La situación de los pescadores y sus familias en Piura es crítica, debido a los oleajes anómalos. Foto: captura.
Las costas del norte peruano continúan siendo azotadas por un fenómeno de oleajes anómalos que ha generado significativos daños, lo que afecta principalmente el turismo y la pesca.
Desde finales de 2024, las autoridades ya habían advertido sobre la posibilidad de un empeoramiento de la situación para 2025 y estas predicciones se han cumplido.
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PIURA: DAÑOS EN TURISMO Y PESCA
El 27 de diciembre, grandes olas volvieron a impactar la zona, perjudicando severamente sectores económicos como hoteles, restaurantes y comercios en Máncora. La pesca también se ha visto gravemente afectada, ya que los pescadores no pueden salir al mar debido a las condiciones del oleaje y la bandera roja que sigue activada desde la última semana de diciembre.
El ministro del Ambiente y el ministro de la Producción visitaron las áreas más afectadas, como Ñuro y Lobitos, comprometiéndose a evaluar los daños y apoyar a los pescadores, quienes han sufrido pérdidas en sus embarcaciones, algunas valoradas en más de 20 000 soles.
Las olas anómalas golpean el turismo y la pesca en Máncora, con pérdidas de hasta 20 000 soles en embarcaciones. Foto: captura.
CRISIS ECONÓMICA DE LOS PESCADORES
Las embarcaciones son una significativa pérdida financiera y se ha interrumpido el sustento económico de muchas familias. Actualmente, los pescadores no pueden trabajar debido al riesgo del fuerte oleaje, lo que pone en peligro sus ingresos.
Además, están pidiendo un subsidio al Ejecutivo. La solicitud de los pescadores está alrededor de los 60 000 soles, aunque también se espera una propuesta oficial de las autoridades.
El oleaje impide el trabajo de los pescadores, quienes solicitan un subsidio de 60 000 soles para paliar las pérdidas. Foto: composición.
OLEAJES ANÓMALOS TAMBIÉN AFECTAN ECONOMÍA LOCAL
La escasez de productos pesqueros ha incrementado los precios en los mercados, afectando la canasta básica familiar. La llegada de turistas, vital en verano, se ha reducido drásticamente, acentuando la crisis económica en la región y requiriendo intervención urgente de las autoridades.
Las asociaciones de pescadores en el norte del país han organizado sus demandas ante las autoridades competentes. Esperan que el Gobierno, a través de Defensa Civil y el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional, evalúe los daños y defina medidas de apoyo económico.
A pesar de los esfuerzos gubernamentales para entregar víveres y asistencia mediante helicópteros, los pescadores insisten en la necesidad de un respaldo económico para enfrentar la crisis.
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