Las autoridades de la región Áncash buscan que el cementerio de Yungay sea declarado como Patrimonio Cultural de la Nación. El camposanto es considerado como la memoria del devastador terremoto de 7,9 en la escala de magnitud de momento ocurrido el 31 de mayo de 1970.

Expertos remarcaron que el panteón forma parte de un sitio prehispánico y alberga algunos monumentos que se construyeron previo al fatídico sismo. "El cementerio fue edificado sobre una huaca y tiene un valor histórico enorme", declaró el historiador José Salazar Mejía a TVPerú Noticias.

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La declaratoria ayudaría que el espacio no solo sea un lugar de memoria para los deudos, sino también un atractivo turístico que impulse el desarrollo de la región.

Cabe precisar que en el cementerio de Yungay, diseñado por el arquitecto suizo Arnoldo Ruska, descansan los restos de los peruanos que quedaron sepultados por el alud en mayo de 1970 tras el terremoto. 

TERREMOTO DE 1970

Hace casi 54 años, un fuerte terremoto destruyó varias ciudades del país y provocó una avalancha en el nevado Ranrahirca que sepultó la ciudad de Yungay.

Un enorme fragmento de hielo se desprendió de la montaña. Al mezclarse con tierra y granito creó un aluvión de lodo que se precipitó a más de 200 kilómetros por hora en caída libre.

El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) lo considera como "uno de los terremotos más destructivos del mundo”, con al menos 70.000 muertes.