Esta mañana, la Municipalidad de San Martín de Porres clausuró el terminal de buses interprovinciales Marcopolo por no contar con autorización para funcionar en el distrito. Los funcionarios colocaron grandes bloques de cemento en la entrada a fin de evitar que este pueda ser reabierto.

La comuna detalló que en el espacio operaban 60 empresas de transporte y que 58 de ellas no contaban con los documentos en regla. Además, explicaron que su funcionamiento dificultaba el tránsito en la vía pública y generaba congestión vehicular.

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Al respecto, el gerente de Fiscalización y Control Municipal, Dick Castillo, indicó que la medida restrictiva aplicará por 30 días calendario y que este trabajo se da con el objetivo de recuperar las calles y acabar con la informalidad. El funcionario también recordó que no basta con tener la licencia de funcionamiento sino que es necesario pasar bajo la evaluación de Defensa Civil.

“Lo que ocasionan estas 60 empresas con los buses que cada una de ellas tiene es un impacto vial negativo (...) Trasladaron (del terminal de Fiori) la informalidad, albergaron la informalidad aquí y solamente le has puesto paredes”, refirió.

Transportistas hacen su descargo

Por su parte, los conductores explicaron que este cierre los perjudica económicamente a ellos y sus familias. Algunos de ellos se enfrentaron al contingente policial y aseguraron que sí cuentan con permisos para transportar personas.