La Policía intervino en flagrancia a una pareja de esposos que vendía certificados negativos de COVID-19 a estivadores y comerciantes del Mercado de Frutas de La Victoria para que puedan seguir trabajando, pese a no haberse sometido a las pruebas o a haber dado positivo.

Se trata de Agustina Vera Ramírez y Pedro Jara Avelino, quienes cobrarban 50 soles por cada documento fraguado. Ambos habían dado positivo al nuevo coronavirus y en lugar de estar en cuarentena se encontraban ofreciendo su ilegal servicio en los alrededores del centro de abastos.

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Incluso, Pedro Jara dijo ser estivador del mercado y reconoció ante las autoridades haber estado en contacto con otros comerciantes y clientes.

Hasta la comisaría de Apolo llegó el alcalde de La Victoria, George Forsyth, para denunciar a la pareja en nombre de la comuna. Con indignación calificó el hecho de “inaudito” y de “traición a la patria” y advirtió que adoptarán medidas para que este tipo de situaciones no se repitan.

“Vamos a tener que tomar otro tipo de control. Ya nos hemos comunicado con el laboratorio que ha hecho el análisis y están entregando el padrón en el que salen especialmente los negativos. A nosotros nos importan los negativos porque solo ellos pueden entrar”, precisó.

Esta madrugada la Fiscalía dispuso el traslado de los detenidos al Hospital Loayza para que sean atendidos y sometidos a pruebas moleculares. Ambos serán denunciados por los delitos contra la fe pública y violación de medidas sanitarias. En tanto, la Policía investiga si esta pareja de esposos es parte de una mafia que pone en riesgo a la población.