Un equipo de fiscalizadores de la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU), de la municipalidad distrital de Surquillo y de la Policía Nacional del Perú (PNP) intervinieron a todas las unidades de transporte público en el cruce de las avenidas Angamos y Tomás Marsano para verificar que el servicio se preste en adecuadas condiciones.

“Estamos en el distrito de Surquillo, en un punto de alta demanda pues conecta con el sur, el centro y el este de la ciudad, en menos de media hora ya hemos detectado 8 vehículos que prestan el servicio sin las habilitaciones correspondientes y tampoco respetan los protocolos de bioseguridad para evitar la propagación del COVID-19”, dijo Maribel Maguiña, subdirectora de Fiscalización de la ATU.

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En paralelo, se realizó intervenciones en Villa María del Triunfo -en el que 7 unidades fueron internadas en el depósito- y otros 30 puntos de Lima y Callao, con fiscalizadores de la ATU y de las municipalidades, “nuestra tarea es que el transporte sea un servicio que resguarde la integridad y la seguridad de los ciudadanos”, remarcó Maguiña.

De esta manera, 15 vehículos fueron enviados a los respectivos depósitos y a los conductores se les impusieron actas de control que, según la falta, pueden llegar hasta los 17 mil soles.