Regiones recibieron S/ 1 200 millones a marzo producto de la actividad minera
Andina
La transferencia de recursos generados por la actividad minera a los Gobiernos Regionales y Locales, que incluyen el Canon Minero, Regalías Mineras Legales y Contractuales, Derecho de Vigencia y Penalidad, sumaron al mes de marzo del presente año un importe superior a los S/ 1 200 millones, de acuerdo al Boletín Estadístico Minero del Ministerio de Energía y Minas (Minem).
Según las cifras oficiales y haciendo el desagregado de los montos, se precisa que por el concepto de Canon Minero se transfirieron más de S/ 737 millones, por Regalías Mineras cifras que superan los S/ 459 millones, y por Derecho de Vigencia y Penalidad un monto superior a los S/ 3.6 millones.
En un contexto marcado por la crisis generada por la pandemia del COVID-19 y sus efectos nocivos, las transferencias de recursos a las regiones producto de la actividad minera permiten la reactivación económica del país, con el fin de ejecutar proyectos que logren reducir las brechas sociales y en consecuencia disminuir el nivel de pobreza en las zonas aledañas a los proyectos mineros.
El reporte estadístico, elaborado por la Dirección General de Promoción y Sostenibilidad Minera, señala que entre las regiones que recibieron más recursos se encontró Áncash (S/ 315 millones) en primer lugar con una participación del 26.2%, mientras que en segundo y tercer lugar están las regiones Arequipa (S/ 134 millones) y Tacna (S/ 114 millones) con participaciones de 11.2% y 9.5% del total, respectivamente.
En la lista continúa Cusco que recibió S/ 108 millones en dicho periodo, seguido de Ica que recibió S/ 99 millones; posteriormente La Libertad que suma más de S/ 91 millones, y Moquegua con S/ 86 millones, entre otras regiones.
Al cierre de 2020 y pese a la pandemia generada por el coronavirus, las transferencias económicas generadas por la actividad minera ascendieron a S/ 4,338 millones, representando el 92.7% del total transferido durante el 2019 por la misma actividad, permitiendo a los gobiernos subnacionales financiar proyectos públicos, generando empleos y mejoras sustanciales en la calidad de vida de la población.