El politólogo de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUPC), Fernando Tuesta Soldevilla, dijo que si no fuera por Pedro Castillo no existiría Perú Libre y que, probablemente, hubiera desaparecido con ínfimos porcentajes en la campaña electoral.

“Hay militantes que han estado desde el primer momento y que llegaron cuando nadie los conocía. Se han fajado, han estado en la primera vuelta, y, además, envían el siguiente mensaje: todos los que están viniendo después, son advenedizos, son oportunistas, no les pueden dar el mismo crédito a los que vienen a última hora cuando ya se ganó empujando el carro en circunstancias difíciles”, comentó.

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Explicó que el propio Vladimir Cerrón tiene que ofrecer; tiene que hacer sus bases empoderadas en relación al gobierno. “Él tiene que ceder porque tiene que entregar puestos en el aparato del Estado”, afirmó.

“En realidad, lo que piden ellos son puestos de trabajo. Pero la calidad de la mayoría de ellos -sin desmerecer- me refiero para estar a cargo de sectores como los ministerios, no la tienen”, insistió. 

De otro lado, el investigador expresó en forma directa que “el presidente Pedro Castillo en realidad no tiene partido. Lo que tiene es de Vladimir Cerrón que fungió de vientre de alquiler y en consecuencia es la primera vez que un mandatario tiene que negociar, y no de manera fácil, justamente con el dueño fundador del partido que lo cobijó”, sentenció.

Remarcó que en estos últimos días pareciera que Vladimir Cerrón aprieta el acelerador para crear mayores espacios en donde él tenga una mayor intervención.  

“Y creo que Pedro Castillo como presidente está en una situación de cierta debilidad. No en general como gobierno porque ya es un gobierno débil aquél que tiene una primera mayoría en el Congreso que no es mucha, 37, como lo han sido anteriormente gobiernos de minoría”, puntualizó.