Las bancadas que renunciaron a la Comisión de Ética solicitaron que este grupo de trabajo se recomponga con un integrante de cada agrupación parlamentaria. Según indicaron, su decisión se debe a que la Junta de Portavoces rechazó la distribución equilibrada de miembros que le propusieron en su momento.

En conferencia de prensa, el vocero de Peruanos por el Kambio, Clemente Flores, dijo que su alejamiento responde a la desconfianza que le genera el eventual manejo de los asuntos que se evalúen en este grupo de trabajo.

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Indira Huilca, portavoz de Nuevo Perú, señaló que la Comisión de Ética se ha convertido en una arma en contra los adversarios del fujimorismo y de blindaje para sus “amigos”. En tanto, el vocero del Frente Amplio, Hernando Cevallos, remarcó que persisten los problemas que llevaron a su recomposición.

A su turno, Patricia Donayre, portavoz de Unidos por la República, instó a Janet Sánchez, presidenta de la Comisión de Ética, a que impulse la aprobación del proyecto de ley que ella misma presentó el año pasado, donde se plantea que dicho grupo de trabajo esté integrado por un representante de cada bancada parlamentaria.

Por su parte, Gino Costa aclaró que de recomponerse la Comisión de Ética la Bancada Liberal regresará a dicho grupo y consideró que en ese caso correspondería elegir una nueva presidencia.