El llamado paro seco en Puno se acató de manera parcial. La medida de fuerza de 24 horas fue convocado por el Frente Unificado de las Cuencas de Puno para pedir justicia por las muertes ocurridas durante las protestas en enero pasado.

El puente internacional de Ilave fue bloqueado por un grupo de manifestantes. Esto obligó a que en el terminal Sur se suspenda el servicio de transporte hacia Yunguyo, Desaguadero e Ilave. Los vehículos informales utilizaron rutas alternas.

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La vía de July también presentó bloqueos, al igual que la interoceánica de Azángaro. Aquí se registró una gran cantidad de vehículos inmovilizados.

Diferente fue el panorama en el Terminal Terrestre de Puno donde los buses salieron con normalidades.

Los centros de abasto de las ciudades de Puno y Juliaca abrieron sus puertas al público con normalidad. Lo mismo ocurrió en los colegios e instituciones públicas y privadas.

MINISTROS SOBRE PARO SECO: EL PAÍS QUIERE TRABAJAR

El acatamiento parcial de esta medida de fuerza es una muestra de que el país quiere seguir trabajando. Los ministros de La Producción y de Comercio Exterior y Turismo coincidieron en que las divergencias pueden expresarse sin afectar los derechos de los demás.

“Siendo respetuosos de las discrepancias también vamos a ser claros que vamos a ser muy firmes en el respeto de los derechos de los demás” afirmó Raúl Pérez Reyes, titular de La Producción.  

Agregó que si vuelven las manifestaciones se afectará al empleo, la actividad económica, el desplazamiento de las personas. Por ello, invocó a quienes quieren manifestarse que lo hagan respetando a los demás.

A su turno, Juan Carlos Mathews, ministro de Comercio Exterior y Turismo dijo que el termómetro en el sur es de gente que quiere trabajar.

“Hay dos lecturas. Una de preocupación más por carácter político-ideológico y, otra de la gente que quiere oportunidades. Lo que estamos haciendo en esta mesa ahorita es lanzar una plataforma de oportunidades y la manera de contrarrestar protestas es generando oportunidades” indicó.

Ambos titulares participaron del lanzamiento de la Semana de la Industria del Perú 2023 que se realizará en Lima del 6 al 18 de junio. Más de mil pequeñas y medianas empresas mostrarán sus productos a 150 compradores internacionales. Se espera que se cierren negocios superiores a los 20 millones de dólares.