Especialistas de la Procuraduría General del Estado realizaron ayer una inspección a la zona costera afectada por el derrame de hidrocarburos y de inmediato han comenzado a trabajar en la cuantificación de los daños a fin de exigir el resarcimiento económico a los responsables de este desastre ecológico. La visita se realizó junto con personal de la Procuraduría Pública Especializada en Delitos Ambientales y la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales.

“Tras esta visita, los técnicos han catalogado el hecho como un desastre ecológico, aunque aún no se puede determinar su alcance ya que la mancha de hidrocarburo ha llegado incluso a Supe y podría llegar hasta Chancay”, señaló Kike Edson Figueroa Auca, titular de la Dirección de Valoración y Pericias de la Procuraduría General del Estado. 

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El procurador General del Estado, Daniel Soria Luján, señaló que la cuantificación de los daños se hará en un trabajo coordinado entre la Procuraduría General del Estado y la Procuraduría Especializada en Delitos Ambientales. 

El equipo de trabajo visitó las playas Cavero, Playa Grande (distrito de Ventanilla) y Los Pocitos (Ancón) constatando el grave impacto del derrame de hidrocarburos. “Tenemos que evaluar y buscar cuantificar, además del impacto ecológico, las pérdidas que este hecho causará en el gremio de pescadores, en el sector turismo y otras actividades que se han visto afectadas por este hecho”, explicó el Figueroa Auca. 

“Desde la Procuraduría General del Estado brindaremos todo el apoyo técnico necesario a la Procuraduría Pública Especializada en Delitos Ambientales a fin de lograr el resarcimiento más justo para el Estado”, señaló el Procurador General del Estado, Daniel Soria Luján.