Ministro Cuenca llama por teléfono y felicita a directores de colegios que iniciaron clases semipresenciales en Arequipa
(Foto: Captura Minedu)
En el inicio de clases semipresenciales, Jessy Cáceres, directora del colegio 40524 del anexo de Huarhua, en la provincia arequipeña de La Unión, se encuentra en el aula con sus cuatro alumnos de segundo grado. De pronto, suena su celular, pero como el número no figura entre sus contactos, lo ignora y continúa con la clase. Ante la insistencia del interlocutor, finalmente decide contestar.
—Hola, ¿quién habla? —dice con cortesía.
—Buenos días, Jessy. Le habla el ministro de Educación, Ricardo Cuenca.
Jessy no lo puede creer y un tanto confundida solo atina a decir: “Señor ministro, qué sorpresa”.
[Lee también: Milena Weepi: primera mujer awajún en graduarse como doctora en educación]
Entonces el ministro Ricardo Cuenca le explica que su llamada tiene el propósito de agradecerle a ella y a todos sus colegas que han retornado a las aulas porque están mostrando compromiso con la educación de los niños del país y voluntad para enfrentarse sin temor a la pandemia e ir venciendo poco a poco la adversidad.
Jessy Cáceres es parte de los profesores de Arequipa que el lunes 19 de abril volvieron a las aulas para iniciar las clases semipresenciales en 14 colegios de zonas rurales de la región en las que no se han presentado casos de COVID-19.
En su intento de reponerse de la sorpresa, Jessy afirma que ella considera que el contacto personal entre el estudiante y el maestro en el aula es mejor que las clases virtuales porque de esa manera los escolares aprenden más. “Además, como estamos a más de 3 mil metros de altura, la conectividad no es buena y el año pasado las llamadas por celular a los alumnos se cortaban a cada rato”, sostiene Jessy, quien ahora está viviendo en el colegio para limitar sus contactos con el exterior y reducir la posibilidad de contagio.
Cuenca, por su parte, señala que el problema de la conectividad tiene larga data y que los esfuerzos que hace actualmente el gobierno para cerrar la brecha digital no van a poder revertir esa situación en el corto plazo. “Por eso me siento orgulloso de los maestros que, cumpliendo todos los protocolos de bioseguridad, están desarrollando clases semipresenciales en las zonas rurales donde las condiciones epidemiológicas lo permiten”, afirma.
Mientras Jessy conversaba con el ministro Cuenca, los cuatro alumnos que escuchaban su clase se han acercado a su escritorio y sus inquietas voces resuenan en el teléfono. “Estoy con mis alumnos, ministro. Saben que estoy hablando con usted”, dice la profesora.
—Hola, chicos. ¿Cómo están? —pregunta Cuenca desde su despacho.
—Bien —responden en coro los cuatro.
—¿Qué tal el cole?
—Muy bien, ministro —replican con entusiasmo.
Luego de conversar con la profesora Jessy Cárdenas, Cuenca se comunicó con los docentes Isabel Andía, directora del colegio 40550 del caserío de Huactapa, y Martín Ludeña, director del colegio 40523 del anexo Mungui, en la provincia de La Unión, también para agradecerles por el esfuerzo y sacrificio que hacen por sus estudiantes al retornar a las aulas con la enseñanza semipresencial.
En la primera institución educativa estudian 40 alumnos del primer al sexto grado de secundaria. En la otra, 16 estudiantes siguen sus clases en dos aulas con dos profesores. Al igual que en la escuela de Huarhua, en estas instituciones educativas hay instalaciones para el lavado de manos, jabón líquido, alcohol, se respeta el aforo establecido en los protocolos sanitarios y los maestros y alumnos usan mascarillas.
A todos los directores que llamó, Cuenca les ofrece disculpas por interrumpir su labor pedagógica y les reitera su felicitación por haber retornado a las aulas pese a la situación adversa y complicada que vive el país a causa de la pandemia del COVID-19. “Que un solo niño regrese a la escuela ya es un logro”, manifiesta.
Con información de Minedu.