Médicos le salvan la vida a adolescente de 12 años al extraerle un tumor de más de 4 kilos
Azumi es una de las 8 adolescentes que anualmente son intervenidas quirúrgicamente en el Hospital Almenara, debido a este tipo de mal: un tumor de ovario; sin embargo, la tumoración de esta pequeña medía 28 centímetros y pesaba 4 kilos y medio. Tras la exitosa cirugía de alta complejidad y riesgo que realizó el equipo de especialistas de Essalud para extirpar esta gran masa, Azumi ha vuelto a renacer.
Los denominados tumores de células germinales se forman principalmente en los ovarios de niñas entre los 9 y 12 años, pero también podrían presentarse en otro grupo etario pediátrico. Representan hasta el 5 % de las tumoraciones que se desarrollan en la infancia y la adolescencia.
Azumi es una de las hijas gemelas de la Sra. Elvia Aguilar. Hasta hace un mes, no noto nada extraño en su niña, más que un leve sobrepeso. No obstante, luego empezó a perder el apetito, adelgazo y sufría de estreñimiento, su vientre se hizo más prominente y es así que ingresó por emergencia al Hospital Guillermo Almenara.
La ecografía abdominal evidencio un tumor en el ovario izquierdo, sin compromiso bilateral, pero había que extirpar inmediatamente. Es que la masa de 4 kilos y medio comprimía el recto, colon, riñón y estómago.
La cirugía era muy riesgosa, esta madre confió en la experiencia de los médicos del Seguro Social EsSalud. Se le extirpo el ovario y parte de la trompa de Falopio y así su caso evoluciona favorablemente. Solo el 5 % de los tumores de células germinales, surgen por predisposición genética, pero el 95 % por mutaciones sin causa identificada.
La Dra. Wendy Figueroa, medico asistente del servicio de cirugía pediátrica del hospital Guillermo Almenara, destaca la importancia de la detección precoz. “Debemos estar atentas a la aparición de alguna masa o tumoración que aparezca en el cuerpo de los niños; sobre todo si están asociadas a pérdida de apetito, dolor abdominal, baja de peso, náuseas y vómitos, acuda inmediatamente al médico".
Elvia Aguilar, madre de Azumi, recuerda que iba todos los días a rezar a la capilla del Hospital Almenara, recibió el aliento del padre, los médicos y enfermeras que le devolvieron a su niña sana y salva.
“Estoy muy agradecida con todos, nos han tratado muy bien, nunca me sentí sola, rece mucho y le dije a mi hija que no me movería de allí sin ella, que la esperaba para abrazarla. Ella nació en este hospital y aquí ha vuelto a nacer tras la cirugía”, señaló emocionada, antes de volver a casa con su hija restablecida.