El Ministerio de Salud (Minsa), junto al Programa Mundial de Alimentos (WFP) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), presentaron el estudio “El Costo de la Doble Carga de la Malnutrición: Impacto Social y Económico en el Perú”, que cuantificó los efectos económicos y sociales generados por la desnutrición crónica infantil, y el sobrepeso y obesidad en el país. 

El estudio concluye que para el 2019, el costo de la doble carga de la malnutrición, asociados al bajo rendimiento escolar, la baja productividad y las atenciones de salud fue de US $ 10 500 millones, equivalente al 4.6 % del Producto Bruto Interno (PBI) del país. De estos, US $ 6562 millones son atribuibles a la desnutrición infantil y US $ 4022 millones al sobrepeso y la obesidad.

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El viceministro de Salud Pública del Minsa, Joel Candia Briceño, explicó la idea central del tema. “La doble carga de la malnutrición es la presencia tanto de desnutrición como sobrepeso y obesidad, incluyendo el déficit de micronutrientes (vitaminas y minerales) en una misma persona, mismo hogar, comunidad o país”, indicó.

"Desde el Minsa felicitamos y agradecemos al Programa Mundial de Alimentos y a la Cepal por haber hecho realidad el presente estudio. Los resultados cobran especial relevancia porque permitirán medir los efectos que genera la malnutrición en la economía y el desarrollo social del país, en especial en la salud, educación, trabajo, producción y ambiente. Esta información resulta imprescindible para generar políticas públicas y estrategias de intervención desde el Estado y la sociedad civil”, concluyó el viceministro Candia.  

En el 2021, el 11.5 % de los menores de cinco años presentó desnutrición crónica (ENDES - INEI), lo cual impacta en el desarrollo de sus capacidades afectando su educación y futura productividad. En el 2017 y 2018 se registra un 37.4 % de niñas y niños de 5 a 9 años con sobrepeso y obesidad (CENAN - INS) que, a largo plazo, podrán generar enfermedades crónicas que representan un alto costo al sistema de salud que también afectará la productividad del país.

Respecto al costo asociado a la desnutrición y la EDA e IRA debido a atenciones de salud, el estudio estima que este fue de US $ 99 millones, mientras que por pérdida de productividad 6400 millones de dólares. Por su parte, el costo del sobrepeso y obesidad fue estimado en US $ 2605 millones, afectando principalmente al gasto público en salud para atender diversas enfermedades como diabetes, hipertensión, cáncer y otras patologías asociadas. 

Según el estudio, si no se toman acciones hoy, en los siguientes 64 años la doble carga de malnutrición podría costar al estado us $ 5 mil millones anuales, (2.3 % del PBI) y más del 80 % de estas pérdidas se deberán al sobrepeso y la obesidad.

Recomendaciones del estudio

Reorientar las políticas públicas para el abordaje de la doble carga de malnutrición de forma efectiva, eficiente y de alcance multisectorial e intergubernamental. Ampliar la prioridad sanitaria de los desórdenes de malnutrición por defecto hacia el abordaje de los desórdenes de malnutrición por exceso.

Fortalecer las políticas intersectoriales e intergubernamentales, lo que implica contar con espacios de articulación supraministerial, para planificar y rendir cuentas de las metas físicas y financieras. 

Evaluar la posibilidad de implementar un Programa Presupuestal orientado a Resultados (PPoR) centrado en la doble carga de la malnutrición, liderada por Minsa y MEF con la participación de Minedu, Midis, Midagri y Produce.