Corte Interamericana de Derechos Humanos juzgará a Perú por esterilizaciones forzadas
La CNDDHH, junto a otras organizaciones civiles, informaron que el Perú será juzgado en la Corte Interamericana de Derechos Humanos por el caso de Celia Ramos.
La Coordinadora Nacional de Derechos Humanos (CNDDHH) junto a otras organizaciones civiles informó que el Estado peruano será juzgado en la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) por el caso de Celia Ramos, víctima de esterilizaciones forzadas en el país.
En conferencia de prensa, señalaron que este acontecimiento marca un paso significativo en el proceso de esclarecimiento y reparación en favor de Celia Ramos y de todas las mujeres que fueron sometidas a este procedimiento por a una política a la que calificaron de “cruel” y “sistemática”.
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También precisaron que se espera tener una sentencia de este caso en dos años.
En declaraciones para TVPerú Noticias, la asesora legal del Centro de Derechos Reproductivos, Lucía Hernández, recalcó que este sería el primer caso en llegar a las instancias internacionales al considerar que las autoridades peruano no fueron suficientes para responder por las víctimas.
“Una noticia bastante importante porque es el primer caso que llega hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos (…) Este caso llegó hasta instancias internacionales porque, a nivel interno, la justicia peruana no fue suficiente para responder a los derechos de las víctimas y sobrevivientes de estas esterilizaciones forzadas”, opinó.
CASO CELIA RAMOS
Como se recuerda, las esterilizaciones forzadas hicieron parte del llamado Programa Nacional de Salud Reproductiva y Planificación Familiar implementado por el gobierno de Alberto Fujimori.
Precisamente, a principios de 1997, Celia acudió a un puesto de salud buscando atención odontológica y desde entonces, igual que le ocurrió a María Mamérita Mestanza Chávez y a miles de mujeres más bajo el régimen de Fujimori, fue buscada y presionada para practicarse una esterilización.
El personal de salud le insistió en que era una operación sencilla, que le evitaría un embarazo riesgoso y le garantizaría acceso a programas sociales para sus hijas. Celia fue forzada a una esterilización en julio de ese mismo año. Debido a esa intervención, murió 19 días después.