Un menor de 12 años venció el cáncer después de casi una década de lucha, gracias al apoyo de sus padres y los médicos del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) San Borja, fueron el sostén para ganar esta batalla que llegó a su fin.

El pequeño fue recibido en medio de aplausos para tocar la campana de la victoria. Luego, le entregaron un diploma de reconocimiento por su valentía y coraje para enfrentar la enfermedad. “Stiven ha vencido a la leucemia”, dijeron los médicos.

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“Por haber completado exitosamente el tratamiento con valentía, tolerancia  y determinación”, se lee en el diploma que le entregó la Dra. Alicia Mafaldo Rengifo, jefa del servicio de Hematología.

Stiven P.R. fue diagnosticado de una leucemia linfoblástica aguda tipo B de muy alto riesgo en el 2013. Debutó con la enfermedad cuando tenía 3 años, la misma que se presentó con moretones en el cuerpo, decaimiento, hinchazón, dolor en las articulaciones al punto que lo dejó sin poder caminar. En el 2015 fue referido al INSN San Borja para iniciar el proceso de cura de la enfermedad con un tratamiento de quimioterapia que duró cerca de diez años.

“Estoy feliz. Ya me curé, ya puedo caminar, puedo jugar y seguir con mi vida, gracias a todos los médicos y enfermeras que estuvieron conmigo. Ahora mis padres me ayudarán a cumplir mi sueño de ser médico para ayudar a los niños con cáncer”, dijo Stiven emocionado.

“Cuando nos dijeron que mi hijo tenía leucemia, mi esposo y yo nos dedicamos a nuestro hijo en cuerpo y alma. Nos propusimos que sea feliz todos los días de su vida. Y lo conseguimos, hoy él nos dice que no se acuerda de las cosas que le han dolido y que ha sido feliz en el hospital”, recuerda Elizabeth Rodríguez, madre del menor.

Cuenta que cada vez que el pequeño Stiven terminaba un tratamiento de quimioterapia pedía ir al parque y a su colegio, a donde regresó para culminar su nido. “Regresó peladito, tuvo todo el apoyo de la directora y de sus compañeros”, dijo.

“Hay todo un proceso que implica recaídas pero los sacamos adelante y logramos que así como Stiven puedan reinsertarse a una vida normal como cualquier niño para que sea una buena persona y un buen ciudadano”, destacó la Dra. Alicia Mafaldo.