En Brasil, exactamente en la ciudad de Río de Janeiro, se registró una sensación térmica de 62,3°C, la mayor en una década. Los especialistas recomiendan la hidratación y a cuidarse de la radiación solar.

Las emblemáticas playas de Ipanema y Copacabana lucían repletas por los veraneantes con el fin de mitigar la alta temperatura. Mientras que, en Sao Paulo con 34, 3°C, los habitantes llenaron los parques y plazas buscando un poco de aire.

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El Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) informó que estas temperaturas han sido la mayor durante el mes de marzo y desde que empezó a medir en 1943.

Las personas optaron por visitar los balnearios del litoral, lo que causó embotellamientos en los accesos a Sao Paulo, con filas de carros de hasta 20 kilómetros. "Antes no teníamos un calor como este, ahora cambió mucho, de un tiempo para acá", dijo un residente de la ciudad de Río de Janeiro.

BRASIL Y LAS LLUVIAS

El gigante de América del Sur se encuentra dividido por el exorbitante sol y las torrenciales lluvias. En algunas localidades del estado sureño de Rio Grande do Sul, se registraron precipitaciones de hasta 300 milímetros.

"La semana será de muy alto riesgo en el Centro-Sur de Brasil por las intensas lluvias y tormentas. El sistema más preocupante es el frío que llegará con lluvias torrenciales y posibles vendavales", advirtió la agencia de información meteorológica MetSul.