Declaran a la Danza Kawrinus de Acomayo como Patrimonio Cultural de la Nación
Foto: Ministerio de Cultura.
El Ministerio de Cultura, mediante la Resolución Viceministerial N° 000165-2022-VMPCIC/MC, declaró como Patrimonio Cultural de la Nación a la Danza Kawrinus de Acomayo, capital del distrito de Chinchao, provincia y departamento de Huánuco.
Se trata de una expresión de la identidad distrital, y una representación de un importante capítulo de la historia de la región, como fue el arrieraje a cargo de pobladores de altura, cuya presencia es indispensable en los momentos rituales más importantes de las festividades de carnaval. La danza, además, es un vehículo para la conservación de una tradición musical local.
La danza kawrinus, forma parte de la tradición local del carnaval, entre los meses de febrero y marzo. Es una representación del arreo de toros por pobladores de las zonas altas, conocidos como kawrinus, en alusión a los arrieros provenientes del distrito de Cauri de la provincia de Lauricocha que trabajaban originalmente en las haciendas de Pachachupan y Cochas Chico, a kilómetro y medio de la actual Acomayo.
La fuerza de estos arrieros, y algunas de sus costumbres relativas al ganado, hizo que la población urbana de Acomayo y Huánuco los viera como un grupo muy diferenciado. La tradición oral refiere que Silverio Esteban, originario de Cauri y que operaba como capataz en la hacienda Cochas Chico, es quien habría traído a Acomayo esta costumbre a fines del siglo XIX.
La danza es interpretada por comparsas conformadas por un conjunto de bailarines que representan a una serie de personajes: tres o cuatro kawrinus o shukus, quienes hacen de arrieros del toro; un torero, persona que interpreta al toro, llamado también wachitoro o toro bravo; una laceadora, quien controla al toro con un lazo; la chakwan o abuela, propietaria del toro, interpretada por una mujer de edad; y un conjunto de tres cantoras conformado por una capitana y dos pallas, quienes interpretan las canciones que acompañan cada acto de la comparsa apoyado rítmicamente de unas diminutas tinyas.
La vestimenta de los kawrinus hace referencia al origen rural de los arrieros, aunque ha tenido ciertas transformaciones. El tocado es un sombrero de paja de ala ancha, de origen norteño; un saco grande y usado, que sustituye al antiguo saco de cordellate de lana negra de carnero propia de las zonas de altura de Huayhuash, de donde se supone provienen los kawrinus. Uno de ellos lleva un saco de terno que deja ver cuando hacen de abogados, llamado por ello shuku tintirillo.
Los pantalones, antiguamente de bayeta de lana negra de carnero, son actualmente de vestir, sujetos a la cintura con una faja o wachku, normalmente tejida de lana blanca o en su defecto de cuero. Para los pies se llevaban ojotas de cuero, y actualmente llevan zapatos viejos de vestir o botas de caña alta. Siempre llevan una bolsa pequeña llamada wallki colgando del hombro izquierdo, un pito, y un cuerno de toro para el sacrificio. Para arriar al toro se lleva una reata, la que hace las veces de látigo.
El torero es interpretado por un hombre que carga encima una figura de toro, hecha con un armazón de madera, cubierto con tela negra cuyo remate es una cabeza de madera, tallada y pintada, con cuernos reales, haciendo siempre la simulación de un toro bravo que amenaza con embestir a los kawrinus y al público cercano. Durante la fiesta se le decora la cabeza con cintas.
El traje de las mujeres de la comparsa recuerda en su mayor parte la vestimenta tradicional de la región oriental de la ceja de selva de Huánuco. Todas llevan un conjunto compuesto por falda negra o azul y blusa blanca o de color claro. La laceadora lleva falda azul, y además una cata o manto multicolor de castilla, y una manta blanca de algodón que lleva sobre la cabeza.
La chakwan usa falda negra y también luce una cata, pero lleva en cambio un sombrero de paja, una manta blanca anudada en banderola sobre el hombro derecho, formando un saco en el cual llevar cosas, una chompa, zapatos cerrados, y porta una canasta de paja. La capitana y las pallas llevan falda negra, también llevan una manta blanca cubriendo la cabeza y otra atada sobre el hombro izquierdo, en cambio calzan sandalias. Para acompañar sus cantos portan en la mano izquierda tinyas diminutas, batidas con palos de la misma proporción.
Además de hacer efectiva la declaratoria, la Resolución Viceministerial, también encarga a la Dirección de Patrimonio Inmaterial, en coordinación con la Dirección Desconcentrada de Cultura de Huánuco y la comunidad de portadores, el elaborar cada cinco años un informe detallado sobre el estado de la danza Kawrinus de Acomayo.
Ello, con la finalidad de mantener actualizado el registro institucional del Ministerio de Cultura en cuanto a los cambios que pudieran haberse producido en la manifestación, así como los riesgos que pudiesen surgir en su vigencia y otros aspectos relevantes.
Asimismo, se dispone la notificación, tanto de la presente resolución como del Informe N° 000491-2022-DPI/MC, y el Informe N° 000003-2022-DPI-PRM/MC, a la Dirección Desconcentrada de Cultura de Huánuco y a la Municipalidad Provincial de Chinchao, para los fines consiguientes.
Con información del Mincul.