El exministro del Ambiente, Ricardo Giesecke, dijo que el tiempo que tomará la limpieza del derrame del crudo en la costa de Ventanilla depende de la logística y tecnología que usarán para limpiar lo visible, superficial, en un plazo razonable de dos meses.

“En estas cosas todo depende de los medios que se pongan a disposición. Es decir, si vamos con dos barquitos, cuatro cilindros, etc., va a tomar mucho tiempo. Pero si se llevaban medios importantes podría ser efectivamente en un plazo razonable; un par de meses”, señaló.

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Lo que ve difícil es el petróleo que se va a quedar en una costa llena de rocas. Y las pequeñas entradas y salidas que tiene toda esa costa que va hasta Huacho y todo aquello que no es playa, resultan rocas, observó Giesecke.

“Entonces, limpiar eso hay que esperar que la naturaleza lo haga y será pues calculando en dos o tres años”, manifestó.

De otro lado, respecto de la multa que aplicó la OEFA a Repsol dijo que “a mí me daría vergüenza hablar de 18 millones porque en realidad el daño es gigantesco. Es tan grande que lo que está pasando es mucho más barato que contaminar y hacer las cosas bien”.

Porque hacer las cosas bien cuestan, prosiguió el exministro, “cada vaciada, cada llevada de pelos requiere la movilización de un montón de recursos. Que es lo que no ha estado haciendo la gente de Repsol. Y simplemente se pone en búsqueda y vaciar, y todo el mundo se va a dormir”, remarcó.

“Creo que es muy importante hacer un poquito de reflexión respecto del tema de las multas. La OEFA tiene un conjunto de multas y los del Osinerming, también. Pero en realidad cuando uno mira el terrible daño -yo le llamo delito ambiental- estas multas quedan muy chiquitas”, sentenció.