Iván Cruz intérprete del icónico tema “Vagabundo soy” en el que pide “déjenme vivir mi vida, yo no soy malo con nadie” fue despedido por sus familiares y también por sus seguidores.

El llamado Rey del Bolero partió a la eternidad el lunes 6 de noviembre tras afrontar varias enfermedades que lo aquejaban desde hacía años.

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“Mozo deme otra copa, esta noche quiero beber” forma parte de la letra de su canción “Mozo, deme otra copa” que fue entonada por sus seguidores que este jueves se concentraron en el Polideportivo Regional del Callao para un homenaje póstumo.

Su féretro junto a una fotografía suya gigante fueron el centro del reconocimiento que le rindió su gente chalaca, pues Iván Cruz nació en el primer puerto.

Su hijo Tony Cruz dijo que lo vivido tras la muerte de su padre es “muy especial, triste pero también reconfortante”. Se refirió al cariño expresado por el público que acudió de diversas partes del país para despedirlo.

Luego el cortejo fúnebre partió rumbo al cementerio de Huachipa. Ahí, una de sus hijas ofreció emotivas palabras.

“Ese Dios que tú me presentaste va a sostener mi vida, la de tus hijos, la de tu esposa y de todos los que te aman. Vete en paz papito lindo”, se despidió.

La Marina de Guerra también acudió al camposanto para despedir a quien en vida fue enfermero naval, actividad que luego dejó por su amor a la música.

Iván Cruz falleció el 6 de noviembre a los 77 años y de inmediato sus restos fueron velados en el Salón Nasca del Ministerio de Cultura, como correspondía por su calidad de artista reconocido.

Sus canciones sobre amor, desamor, despecho e infidelidad cobraron notoriedad por el sello inconfundible de su voz que lo llevaron a ser conocido también como el Rey de las cantinas.

El consumo de alcohol y drogas le ocasionaron enfermedades que lo llevaron varias veces a ser internado. En el año 2000, Iván Cruz se convirtió al cristianismo, pero años después se dijo que habría recaído.